En el dialogar no únicamente se encuentran dos sujetos , también se requiere cierta voluntad y capacidad para comunicarse. En estos tiempos hablamos, hablamos, chateamos, nos meeteamos, nos skypeamos, nos jetseteamos, nos zoomeamos, nos hangouteamos, etc pero la pregunta es : ¿Nos estamos escuchando ?
Hace días en un artículo en el periodico el profesor Manuel Cruz escribia sobre la diferencia entre pensar el bien y hacer el bien , entre salir a aplaudir y realmente comprometerse con los demás.
Estos tiempos sobreviviendo es fácil convertir la manifestación en un ritual folklórico y automatizado, es espectáculo . Recordemos el movimiento camisetas verdes, amarillas, etc .. o tantas otras manifestaciones que podemos vivir estéticamente como una buena voluntad . Sin embargo la pregunta nos obliga a enfrentarnos con nuestro naufragio personal y social.
¿Hasta dónde estamos dispuestos a aguantar por el bien personal y el bien común ? Se trata de mantener las multas , la judicialización de la sociedad como instrumento político, la sanción educativa como instrucción para el confinamiento de las juventudes hasta salir de nuevo a una vuelta a lo de siempre sin más para seguir consumiendo compulsivamente, ser acríticos, ser obedientes, ser sumisos, hedonistas e irresponsablemente en una realidad asocial con el medio ambiente, con los excluidos, con el mundo en general ...
El estar confinados exteriormente es una cosa soportable que puede atender al miedo, a la responsabilidad al si se quiere pero el confinamiento interior es otra historia diferente. ¿Alguien estará dispuesto a cambiar a la clase política exigiendo responsabilidades , exigiendo políticas sociales justas, a luchar por la renda básica, a realizar políticas inclusivas, a luchar por la europa insolidaria con los refugiados, a cambiar los hábitos a comprar en monopolios mercantilistas , en dejar de apropiarse de todo bien privado favoreciendo una clase rica cada vez mayor frente a una mayoría que va empobreciendose ?
¿se luchará por una educación pública como la sanidad pública ? ¿Se luchará por una dignidad humana ?
Marina hace años en "Ëtica para náufragos" diferenciaba entre una sociedad que podía convertir las personas en normales y anormales , con patologias que podrían justificar conductas delictivas y una sociedad alejada de esto . O locos o santos como el decía.
La filosofia se vuelve loca cuando se convierte en manuales de autoayuda para la gente y da recetas como infalibles , o bien si instrumentaliza el saber sin ofrecer verdaderamente una posibilidad de recuperar el pensar desde el dialogo, la crítica, el cuidado de uno mismo , la estetica de la existencia misma como base para examinarse con la vida de uno y ponerla a examen.
O somos canallas insolidarios o somos algo diferentes porque precisamente sabemos que no actuamos bien con los demás. Los aplausos no son ninguna muestra de solidaridad, ni las campañas de recogida de dinero promocionadas por bancas poco éticas, .. especular con el consumo , especular con el dinero , con la productividad nos lleva a un gasto insostenible.
El deber es racional pero no emocional, la norma es social no individual , el imperativo depende del desarrollo moral de las personas . El contexto, la sociedad, ..La realidad no es la misma para todas . Si navegamos por esta fugas mundi , por esta actitud cmo decía R,Bodei podemos vivir de forma inteligente para ir a favor del viento y no contra la corriente que nos lleva. La voluntad no es el determinismo dice Marina de la conducta . Quien navega contra las circunstancias en el fondo examina siempre la ruta mejor para la vida en general . La filosofia no es una simple forma de vida es una condición de ejercer contra estos naufragios permanentes la posibilidad de ser sinceros con nosotros mismos.
La historia se explica por los cobardes , los mediocres, los ignorantes, los estúpidos , los desvergonzados . William Shakespeare decía que la vida es el relato contado por un idiota lleno de furia y ruído que no tiene ningún sentido .
Como idiota me intento explicar . Perder amigos, amigas, conocidos, padres, madres acentua esta furia y convierte el ruido de nuestro yo en insoportable. SI añadimos la soledad de la ancianidad -estos días hablamos de más de 20 personas ancianas muertas en sus domicilios solas- el combinado que resulta se presenta con la necesidad de acabar pronto con esta vida.
La vitória de la voluntad contra el determinismo desde la inteligencia de la razón no resulta fácil , hay demasiado ruido molesto que nos permita navegar hacia un rumbo.
Supervivencia para náufragos decía Marina , saber la ruta, conocer como se pilota , tener una buena embarcación para conseguir una vida con algo de sentido.
La ética no es la moral , la construcción del carácter no es la habituación o la construcción social de las normas sociales . En la estética de la existencia el examen de lo que nos representamos nos indica que la dignidad , la felicidad, de la verdad. Esto último es lo que nos convierte en idiotas desalmados o idiotas en busca de la verdad y eso es la ética .
